El fuerte terremoto localizado su epicentro en la zona de Cobquecura al mar, siendo severamente afectadas las localidades costeras inmediatamente cercanas como Constitución, Iloca, Duao y más al sur Dichato, Tomé y el puerto de Talcahuano, tendría un origen no netamente tectónico sino que algunas fuentes declaran que, al igual que los análisis sobre el terremoto de Haití, habría sido inducido por agentes y científicos norteamericanos, vía satelital. Las razones de esto son aún más siniestras: Michele Bachelet a solo semanas de su salida del gobierno y de la derrota de la coalisión que representa, en un acuerdo feminista y secreto con la Secretaria de Estado Norteamericana, H. Clinton (lo que explica que ande aquí disimulada con telefónos satelitales de regalo) habría organizado este terremoto (que no está en ningún programa de gobierno, ni el del mismísimo Tío Rico ManPato) por varios motivos, entre ellos, viejas rencillas que tuvo Michele de joven con algunos Miristas y que no fueron saldadas en su momento incrementaron un resentimiento especialmente dirigido a la ciudad y capital del Bío Bio, Concepción, cuna del movimiento Mirista en Chile. De ahí se entiende que Michele, como buena hija de militar, fuera implacable a la hora de tomar esta decisión y no le temblara la mano para sellar este acuerdo con Clinton, logrando con creces sus objetivos, al ver que esta ciudad se hunde en el caos y ha hecho necesaria y justificada la intervención de sus soldaditos de plomo y un toque de queda que recuerda lo peor de los primeros años de Dictadura. Esto explicaría la tardanza en disposición de asistencia general para la zona, la poca movilidad en la costa de patrullas de rescate, la fuerte arremetida del Ministro de Defensa, que se ve feliz en su rol de protagonismo desenfadado, y la tranquilidad y aplomo de la Presidenta de Chile, a pocos días del final de su mandato, el que mucha gente ve con una desconfianza enorme debajo de la falda.